El MAFC: El Camino Hacia un Futuro Sostenible
El 12 de diciembre pudimos asistir a la Jornada informativa organizada por la Cámara de Comercio de Castellón, en la que se trató un tema que va a ir tomando relevancia en los próximos años, especialmente para las empresas importadoras.
Figura 1: Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón
¿Qué es el MAFC?, ¿Cuál es el objetivo de este mecanismo?, ¿Cuáles son las fases de implantación del MAFC y cómo afectarán a las empresas ?, ¿Qué pasará con el actual RCDE? ¿Cómo se relaciona el MAFC con los acuerdos internacionales como el Protocolo de Kioto y el Acuerdo de París?
Vicente Canet, Responsable OEA y Cumplimiento Normativo, responde todas estas preguntas relacionadas con el MAFC y explica su influencia directa en el comercio internacional.
Figura 2: Vicente Canet en Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón
El Camino Hacia un Futuro Sostenible
En el trasfondo de la preocupación global por el cambio climático, el nacimiento de iniciativas internacionales marcó hitos cruciales en la búsqueda de soluciones ambientales. En 1997, Las Naciones Unidas dejaron un precedente significativo al firmar el Protocolo de Kioto, un acuerdo pionero destinado a mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en los países industrializados.
Sin embargo, el impulso hacia la sostenibilidad no se detuvo ahí. En 2015, el mundo asistió a la firma del aún más ambicioso Acuerdo de París, un pacto global diseñado para limitar el aumento de la temperatura global y enfrentar el desafío climático de manera más integral.
Por su parte, la Comisión Europea, reconociendo la urgencia de abordar la crisis climática, adoptó las directrices establecidas por el Acuerdo de París como piedra angular de su estrategia. Así nació el Plan para la Transición Ecológica, un marco fundamental que trazó el camino hacia un futuro más sostenible. En este contexto, la Comisión Europea dio un paso audaz al aplicar estas directrices al objetivo 55, un retador plan para reducir las emisiones de carbono en un 55% para 2030, basado en reformar el RCDE.
Como resultado directo de esta iniciativa, emergió el Mecanismo de Ajuste de Frontera de Carbono (MAFC), una herramienta destinada a equilibrar las emisiones de carbono en la frontera y que representa un avance significativo en la lucha contra el cambio climático al abordar no solo las emisiones internas, sino también la huella de carbono asociada con las importaciones. Este enfoque integral refleja un compromiso real hacia la construcción de un futuro más sostenible, donde la responsabilidad ambiental trasciende las fronteras nacionales.
Figura 3: Orígen del MAFC
Fuente: Presentación Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón por Vicente Canet
RCDE: El que contamina, paga
El régimen de comercio de derechos de emisión (RCDE) busca conciliar la protección del medio ambiente con la necesidad de mantener la competitividad en ciertos sectores y se fundamenta en el principio fundamental: “el que contamina paga“.
De este modo, las industrias afectadas por este régimen deben adquirir permisos de emisión correspondientes a cada tonelada de CO2 liberada. Estos permisos se obtienen mediante subastas, regidas por la ley de oferta y demanda.
¿Cuánto cuesta contaminar en Europa?
Como se puede observar en el siguiente gráfico, el valor de los derechos de emisión de CO2 se ha triplicado, en los últimos 3 años.
Figura 4: Evolución del valor de los derechos de emisión Fuente: Investing
Esto supone un evidente problema para las industrias, que buscan otras maneras de evitar este coste desplazando su producción hacia otros países fuera de la Unión Europea con regulaciones ambientales más flexibles. Es lo que se conoce como Fuga de Carbono.
¿Cómo se produce la fuga de Carbono?
Este fenómeno ocurre cuando las empresas, en un intento de evadir las regulaciones ambientales más estrictas, trasladan sus operaciones a regiones con normativas más laxas. Ya sea desplazando fábricas o importando bienes desde lugares con estándares medioambientales inferiores, el resultado es el mismo: un escape de emisiones de carbono que contrarresta los esfuerzos realizados por otros países con políticas ambientales más exigentes, como es el caso de la Unión Europea.
En un primer intento de evitar esta fuga de Carbono, algunos de estos permisos se han asignado de manera gratuita, sobre todo para las industrias más vulnerables, pero no es una solución sostenible.
Como consecuencia, surge, el Mecanismo de Ajuste de Frontera de Carbono (MAFC) como una herramienta legislativa con el objetivo primordial de contrarrestar la fuga de carbono, una preocupación creciente en el contexto global.
Desentrañando el MAFC: Un Enfoque Integral para Contrarrestar la Fuga de Carbono:
Su funcionamiento se centra en ajustar los costos de emisión para las mercancías fabricadas fuera de la Unión Europea, buscando eliminar la ventaja competitiva creada por la diferencia en los derechos de emisión.
Como explica Canet, hasta ahora, un productor podía importar acero de China, con el fin de ahorrarse el coste de los RCDE que habría tenido que pagar en el caso de haber producido esta mercancía dentro de la UE. Con la entrada en vigor del MAFC, cuando esta mercancía llegue a la frontera de la UE, dicho fabricante deberá pagar exactamente los derechos de emisión que no fueron abordados en su lugar de fabricación.
Figura 5: Derechos de emisión según localización de la producción
Fuente: Presentación Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón por Vicente Canet
En términos simples, este mecanismo, legislado por la Comisión Europea, busca nivelar las condiciones, asegurando que el costo total de importar sea equivalente al de la fabricación dentro de la Unión Europea, eliminando la ventaja competitiva de otros países cuyas políticas medioambientales son menos restrictivas.
Por tanto, los objetivos del MAFC están claros:
- Por una parte, promover la reducción global de emisiones ya que, al aumentar los impuestos sobre mercancías con grandes emisiones, se espera fomentar prácticas productivas más sostenibles.
- Además, el MAFC tiene una visión más amplia al pretender influir en políticas similares en otros países, incentivando a naciones como India y China a adoptar medidas que reduzcan las emisiones, ya que la importación a la Unión Europea implicaría el pago de ajustes de emisión para sus clientes europeos.
Ámbito de Aplicación del MAFC y Excepciones:
¿Qué mercancías están sujetas al MAFC?
El Mecanismo de Ajuste de Frontera de Carbono (MAFC) tiene un impacto directo en diversas mercancías, abarcando sectores clave en la economía actual. Actualmente, el MAFC se implementa en las siguientes categorías:
Figura 6: Mercancías Sujetas al MAFC
Fuente: Elaboración propia a partir del ANEXO I – REGLAMENTO (UE) 2023/956 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO
Este conjunto inicial refleja la preocupación por las emisiones de carbono en sectores estratégicos, donde la reducción de la huella ambiental es imperativa. Es importante destacar que el MAFC no se limita a estas categorías y se proyecta que su alcance se amplíe en el futuro para abordar aún más mercancías y sectores, fortaleciendo así su impacto en la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero.
Figura 7: Proyección de Ampliación del Alcance del MAFC
Fuente: Elaboración propia a partir de la Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón
Esta expansión planificada refleja el compromiso continuo de la Comisión Europea con la sostenibilidad y la mitigación de impactos ambientales en diversos sectores industriales. A medida que el MAFC evoluciona, se espera que su influencia abarque una gama más amplia de productos, promoviendo prácticas comerciales más ecológicas y alineadas con los objetivos climáticos a nivel global.
En cuanto a lo que el sector cerámico se refiere, esta primera lista de mercancías sujetas a MAFC todavía no afecta de forma intensa, aunque si que hay varias de ellas que pueden afectar de forma importante a determinado grupo de empresas. Es el caso de las empresas fabricantes de maquinaria, especialmente afectadas por su importación de materias primas como el acero, hierro o aluminio, o también los consumidores de arcillas caoliníticas, utilizadas en la formulación de diferentes pastas blancas.
También pueden verse afectadas a corto y medio plazo por otras mercancías transversales como son el hidrógeno o la electricidad. Por último, el alcance de mercancías afectadas se verá incrementado en el futuro, con una primera proyección del alcance en la que ya se introduce productos químicos, papel, cartón y transporte, materias primas todas ellas de menor o mayor impacto en este sector.
¿A qué países aplica el MAFC?
El Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (MAFC) se extiende a todos los países miembros de la Unión Europea (UE), aunque con ciertas excepciones aplicables a mercancías originarias de naciones y territorios específicos que, a pesar de no ser miembros plenos de la UE, mantienen políticas similares al MAFC. Por ejemplo, Islandia, Liechtenstein y Noruega tienen acuerdos de asociación para participar en el mercado único, Suiza cuenta con un acuerdo de libre comercio, y los territorios de Büsingen, la isla de Helgoland y Livigno tienen estatus especial dentro de Alemania, Italia y Suiza respectivamente. Ceuta y Melilla, siendo ciudades autónomas españolas en el norte de África, también están incluidas.
¿A partir de qué cantidades facturadas aplica el MAFC?
El Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (MAFC) aplica a mercancías sujetas al MAFC, cuyo valor intrínseco sea mayor o igual a 150€.
Por tanto, aunque la clasificación arancelaria pueda indicar la sujeción al MAFC, cualquier mercancía que entre en la UE y cuyo valor intrínseco esté por debajo de los 150€ no estará sujeta a este mecanismo.
Tal y como apunta Canet, es crucial tener en cuenta que, en los casos de los envíos de múltiples mercancías cuyas facturas individuales sean inferiores a 150€, el MAFC podría aplicar, en el caso de que la suma de todas las facturas individuales de dicho envío, excedan los 150€, por lo que destaca la importancia de declararlas con precisión.
Cronograma de Implementación del MAFC
La entrada en vigor del Mecanismo de Ajuste de Frontera de Carbono (MAFC) está detallada en el artículo 36 del reglamento y se implementará en 3 fases.
Aunque el MAFC, oficialmente, entró en vigor el día siguiente a su publicación en mayo de 2023, su aplicación efectiva comenzó el 1 de octubre de 2023, según lo establecido en el artículo 2.
Sin embargo, este inicio no implica una aplicación total de todos los Artículos que constituyen el MAFC desde dicha fecha. La implementación de este mecanismo se hará de una manera gradual, dividida en tres fases distintas:
Periodo transitorio 1: Del 1 de octubre de 2023 al 31 de diciembre de 2024
Durante este período inicial, el objetivo es establecer un control efectivo sobre las mercancías cuya producción genera mayor cantidad de gases de efecto invernadero (Figura 6: Mercancías Sujetas al MAFC) y sentar las bases para una transición hacia prácticas comerciales más sostenibles.
Además, este período marca el fin de las asignaciones gratuitas de emisiones (RCDE), al mitigar el riesgo de Fuga de Carbono mediante el MAFC.
- Funciones de los Estados miembros:
Cada país miembro de la UE deberá designar la Autoridad Nacional Competente (ANC) que supervisará y hará cumplir el Reglamento. La Comisión Europea pondrá a disposición la lista de estas autoridades competentes en toda Europa. En el caso de España, el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, MITECO, ha sido designado como Autoridad competente, según la publicación de la Comisión Europea del 17 de noviembre de 2023. Las ANC se encargarán, en particular, de conceder la autorización a los importadores establecidos en sus Estados miembros para acceder al Registro transitorio del MAFC.
- ¿Qué obligaciones tendrán los importadores, durante el Periodo Transitorio 1?
En esta fase, la presentación de informes trimestrales (informe MAFC) es esencial, cubriendo detalles sobre la cantidad de mercancías importadas durante el trimestre e incluyendo las emisiones directas e indirectas implícitas en ellas y los precios del carbono pagaderos por dichas emisiones.
El plazo para la presentación del informe a la Comisión será de 1 mes tras la finalización de cada trimestre. De esta manera, el primer informe deberá ser presentado, a más tardar, el 31 de enero de 2024 (correspondiente a las importaciones del último trimestre de 2023) y el último informe el 31 de enero de 2026 (correspondiente a las importaciones del último trimestre de 2025).
Registrarse como “Declarante Notificante“. Esta figura será el responsable de la presentación de dichos informes MAFC y podrá ser llevado a cabo por el propio importador o por un representante aduanero indirecto, dependiendo de la ubicación del importador (dentro o fuera de la UE).
Periodo transitorio 2: Del 1 de enero de 2025 al 31 de diciembre de 2025
- ¿Qué obligaciones tendrán los importadores, durante el Periodo Transitorio 2?
Durante este periodo, además de las obligaciones de presentación de informes, los importadores deben cumplir con otras condiciones establecidas en el Reglamento:
Será obligatorio registrarse como “Declarante Autorizado MAFC”.
Esto significa que, el importador deberá solicitar la condición de Declarante Autorizado a efectos del MAFC y la solicitud de autorización se presentará a la Comisión a través del registro MAFC.
En este registro deberán indicarse detalles de cada Declarante autorizado a efectos del MAFC (Nombre, información de contacto, EORI, número de cuenta MAFC, número de identificación, etc.) pero también información sobre los titulares y las instalaciones.
- Funciones de la Comisión Europea
Por su parte, la Comisión pondrá dicha información a disposición de las autoridades aduaneras y las autoridades competentes de manera automática y en tiempo real.
Fase de Aplicación Plena (A partir del 1 de enero de 2026)
Llegado a este último periodo, entrará en vigor el artículo por el cual las autoridades aduaneras no permitirán la importación de mercancías por ninguna persona que no sea un declarante autorizado a efectos del MAFC.
Además, deberán comunicar a la Comisión toda la información sobre las mercancías declaradas. Por su parte, la Comisión está obligada a comunicar dicha información a las autoridades competentes del Estado miembro del declarante autorizado.
- ¿Qué obligaciones tendrán los importadores?
Adquirir los certificados MAFC necesarios, teniendo en cuenta que cada certificado representa 1 Tonelada de emisiones de CO2 implícitas en las mercancías importadas. Estos certificados se venderán a declarantes autorizados MAFC al precio calculado en base al promedio de los precios de cierre de los derechos de emisión del RCDE de la UE.
También deberá ser presentada la declaración MAFC. Esta declaración contiene información sobre las emisiones de CO2 asociadas a las mercancías importadas, incluyendo los siguientes apartados:
- La cantidad total de cada tipo de mercancía importada en el año natural anterior
- El total de emisiones implícitas en las mercancías mencionadas anteriormente.
- El número total de certificados MAFC a entregar, correspondientes al total de emisiones implícitas.
En cuanto a plazos, a más tardar el 31 de mayo de cada año, cada declarante autorizado a efectos del MACF utilizará el registro MAFC para presentar una declaración MAFC correspondiente al año natural anterior.
Por tanto, la primera declaración MAFC, correspondiente al año natural 2026, deberá ser presentada por cada declarante autorizado MAFC, a más tardar el 31 de mayo de 2027.
Figura 8: Cronograma de aplicación del MAFC
Fuente: Elaboración propia a partir de la Jornada Mecanismo Ajuste Frontera de Carbono en Cámara de Comercio de Castellón
En conclusión, el MAFC es una herramienta ambiciosa que tiene el potencial de transformar el comercio internacional y promover prácticas comerciales más sostenibles. A medida que se vaya implementando, será importante que las empresas importadoras estén preparadas para cumplir con las nuevas regulaciones y ajusten sus prácticas comerciales para reducir su huella de carbono. A pesar de que esta adaptación supondrá un aumento en los costes, también es una buena oportunidad para mejorar su reputación y diferenciarse de la competencia al adoptar prácticas más sostenibles.
Vicente Domínguez Santos
Unidad de Inteligencia Competitiva del ITC-AICE
