La drástica destrucción de compañías de nueva creación
A nivel europeo, nuestro país es punta de lanza en tener iniciativas emprendedoras, creando empresas de todo tipo y con infinidad de ideas innovadoras y disruptivas. Sin embargo, durante los últimos años, no logramos ser capaces de que esas empresas perduren de manera indefinida en el tiempo. Gracias al último informe de crecimiento empresarial elaborado por la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), se pone de manifiesto este hecho.
Ahondando en el informe, podemos apreciar que el 61,5% de las empresas que se crean no superan los 5 años de vida (Figura 1).
Figura 1. Fuente: CEPYME sobre la base de Eurostat – El Economista
Dato que no casa con el carácter emprendedor de nuestra sociedad, ya que creamos más empresas que, por ejemplo, nuestros compañeros franceses, alemanes o italianos. (Figura 2).
Figura 2. Fuente: CEPYME sobre la base de Eurostat
Motivos y posibles soluciones
Al parecer, el principal motivo de que esto ocurra está relacionado con el tamaño del tejido empresarial español, el cual suele ser más pequeño que el del resto de países de nuestro entorno y está más atomizado. De hecho, el 94% de nuestro tejido se compone de microempresas con menos de 10 trabajadores (Figura 3) lo que produce un descenso de la competitividad y de la productividad. Además, desde CEPYME sostienen que las empresas españolas se ven sometidas a excesivas cargas y controles que se traducen en una menor esperanza de vida que las de otros países.
Figura 3. Fuente: Tejido empresarial en España – Empresaactual.com (web de Informa D&B)
También hemos logrado recabar la opinión del Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos de España, profesionales que asesoran a PYMES en sus trámites y en el desarrollo de su actividad, entre otras funciones. En concreto, estiman que durante este año bajen la persiana 300.000 empresas. Para este colectivo, estas empresas mueren por la crisis de precios, suministros y el endurecimiento de la coyuntura. Pero, un motivo destaca por encima del resto: muchas pymes no tienen una caja de resistencia superior a 4 meses de actividad. Los fondos de esta caja de resistencia se ven menguados por el fin de los ERTE arbitrados para paliar los estragos económicos de la pandemia de coronavirus, la devolución de los créditos ICO y la indefinición sobre cómo acceder a los fondos europeos, por destacar algunos factores.
Para intentar remediar esta situación, estas empresas solicitan crédito público, al igual que tienen otras economías de la Eurozona. También proponen que no se genere confusión en la instrucción de procedimientos de concurso o quiebra y, por último, piden un régimen especial para las microempresas, al ser mayoritarias en España y suponer el 90% de las empresas concursadas.
Incluso en plano regional, disponemos datos poco halagüeños en este sentido. Castellón ha perdido medio millar de pequeños comercios en diez años, lo que supone el 13% del total de los locales de la provincia. Además, hasta un 20% de los negocios locales vigentes podrían cerrar definitivamente este año, según las estimaciones de la Confederación de Comercio de Alicante, Valencia y Castellón (Confecomerç)
Propuestas para favorecer el crecimiento empresarial
Para concluir, CEPYME nos proporciona una serie de medidas para intentar que esta situación pueda revertirse en el futuro.
- Hacer efectivos los escalones regulatorios después de cuatro años consecutivos de cumplimiento de los requisitos. Esto evita que se disparen por un crecimiento circunstancial y da tiempo a la pyme para seguir creciendo, por lo que el umbral regulatorio dejaría de ser un obstáculo.
- El establecimiento de mecanismos y medidas fiscales que favorezcan y faciliten la inversión en PYMES españolas por parte de las personas físicas, así como de las personas jurídicas, de ámbito nacional y de países de la Unión Europea. Para ello es fundamental establecer deducciones fiscales importantes, promover la seguridad jurídica y la transparencia de las operaciones.
- Desarrollo de un paquete de medidas y ayudas temporales que promuevan y hagan muy atractiva la fusión de empresas con el objetivo de que estas ganen tamaño y competitividad. Para ello deben incluir deducciones fiscales específicas que compensen los costes de las fusiones y las alienten, así como medidas temporales de ámbito fiscal, laboral, etc.
- Medidas que promuevan la profesionalización de la gestión de las pymes españolas, así como la formación y el “re-skilling” de los empresarios españolas para poder dirigir sus compañías en el nuevo entorno.
Inteligencia de Mercado en ITC-AICE
